Detectar problemas de lectura en prelectores

Detectar problemas de lectura en prelectores

Una prueba biológica rápida permite identificar a los niños y niñas que tienen problemas de alfabetización o discapacidad de aprendizaje en su etapa de prelectores, según una investigación de liderada por Nina Kraus, directora del Laboratorio de Neurociencia Auditiva de la Universidad Northwestern.

 

Este martes se han publicado los resultados de una investigación liderada por Nina Kraus, directora del Laboratorio de Neurociencia Auditiva de la Universidad Northwestern, en Evanston, Illinois, Estados Unidos, en torno a la detección de problemas de alfabetización o discapacidad de aprendizaje en prelectores.

El estudio, publicado en la edición de julio de PLOS Biology, se centra en la capacidad de los niños y niñas prelectores de descifrar el habla, específicamente las consonantes, en un ambiente ruidoso, caótico. Los investigadores encontraron que los prelectores cuyos cerebros encuentran dificultades para procesar el habla en un contexto de ruido son más propensos que el resto a tener problemas con el desarrollo del lenguaje y la lectura cuando llegan a la edad escolar.

Este vínculo recién descubierto entre la capacidad del cerebro para procesar el lenguaje hablado con ruido y la habilidad de leer en prelectores aporta muchas claves para su futura alfabetización. Hay intervenciones cruciales y muy efectivas que se pueden hacer con los prelectores que presentan dificultades. El reto ha sido identificar a los niños y niñas candidatos para estas intervenciones, y ahora han descubierto una manera de hacerlo.

El estudio, que mide directamente la respuesta del cerebro al sonido utilizando la electroencefalografía (EEG), es uno de los primeros en descubrir el efecto perjudicial de los ambientes ruidosos para los niños prelectores, porque pueden alterar los mecanismos cerebrales asociados con el desarrollo de alfabetización en los niños en edad escolar. Esto sugiere que la capacidad del cerebro para procesar los sonidos de las consonantes con ruido es fundamental para el desarrollo del lenguaje y la lectura. Si un niño no puede descifrar sonidos con ruido, no podrá desarrollar los recursos lingüísticos necesarios cuando comience el aprendizaje de la lectura.

En el marco del estudio, en el que participaron 112 niños con edades entre los 3 y los 14 los investigadores analizaron tres aspectos diferentes de la respuesta del cerebro al sonido: la estabilidad con la que los circuitos estaban respondiendo, la velocidad y la calidad con la que los circuitos representaban el timbre del sonido. Con estos tres datos, desarrollaron un modelo estadístico para predecir el rendimiento de los niños en las pruebas clave de alfabetización temprana. Una evaluación neurofisiológica de treinta minutos predice con una precisión muy alta cómo un niño de 3 años de edad se desenvolverá en múltiples pruebas de prelectura y cómo un año más tarde a los 4 años lo hará con múltiples habilidades lingüísticas importantes para la lectura. Asimismo, el modelo permite predecir con exactitud la agilidad lectora en los niños en edad escolar, además de si habían sido diagnosticados con una discapacidad de aprendizaje.

El equipo de Kraus continuará trabajando con estos niños y analizando su progreso en la escuela en el marco del proyecto «Biotots«.

 

Fuente: Northwestern University.

 

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Comentarios (1)

Interesante artículo, útil y muy informativo.
Gracias!

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